EL IMPACTO DE LA CALIDAD

Fotografía: Javier Ishino 

A Compás inauguró el Festival de Teatro Escénica 2016 y cautivó al público por segunda vez con la obra "Las Hermanas del Alba", en el Teatro Municipal  Alberto Saavedra Pérez 

*Artículo publicado el domingo 13 de noviembre en el Suplemento Tendencias del diario La Razón

Una procesión que partió de las inmediaciones de la calle Jaén, encabezada por Bernarda Alba y sus cinco hijas -personajes de la obra de danza teatro “Las Hermanas del Alba”-  vestidas de luto, acompañadas de una banda que interpretaba marchas fúnebres, y por el público, que sorprendido y expectante recorrió esta estrada colonial para dirigirse al Teatro Municipal Alberto Saavedra Pérez, hizo su ingreso pausadamente hasta ingresar a este escenario que recibió al elenco de Yadir Vázquez.

Sin duda, un inicio que impactó al público, así como la propuesta del coreógrafo y director de la compañía A Compás, que por segunda vez, puso en escena en la ciudad de La Paz esta su obra, en versión libre de la original de Federico García Lorca, “La Casa de Bernarda Alba”, que en esta ocasión tuvo el honor de abrir la temporada de Teatro “Escénica” 2016, tras haber sido estrenada el mes de septiembre pasado en el mismo recinto, y luego de presentarse en el Festival Internacional de la Cultura en la ciudad de Sucre.

“Las Hermanas del Alba”, obra en danza-teatro en estilo flamenco, interpretada por el elenco de la compañía de danzas españolas, fue aclamada por el público, que se dio cita en este escenario municipal para apreciar un trabajo de calidad, en esta primera obra argumental que presentó el coreógrafo cubano que reside en Bolivia desde hace más de una década.

Inspirado en la obra cumbre de García Lorca, Vázquez se arriesgó a montar esta tremenda obra, con la certeza de que daba la talla para tal faena, pues cuenta con un sólido elenco que supo estar a la altura de la tarea, y una rica experiencia acumulada, otrora como primer solista del Ballet Español de Cuba. Otro acierto fue también la participación de la actriz invitada, Martha Monzón que encarnó a Bernarda Alba, de manera magistral

Fotogrtafía: Javier Ishino

Entre las solistas, se destacaron Helena Bravo, que hizo el papel de Adela, así como Ximena Vidaurre, en el rol de Martirio, y Kantuta Cavour, como Poncia, personajes muy bien caracterizados y trabajados por el coreógrafo. Las otras solistas, no menos importantes, mostraron también un sólido trabajo técnico e interpretativo, en conjunto. El cuerpo de baile, que encarnaba al “pueblo”, acompañó el desarrollo de la obra, haciendo presencia en momentos puntuales, contribuyendo a esta obra dramática que finaliza en tragedia.

La obra de García Lorca, cargada de simbolismos, muestra la profunda represión en la que se hallaban sumidas, principalmente las mujeres de la sociedad española, particularmente las de su pueblo natal, Granada, ceñidas por estrictos valores morales. Sumisión, represión, llevadas al extremo, y una fuerte presencia de la autoridad, son las que caracterizan a esta obra cumbre de la literatura española de principios del siglo XX, la misma que ha sido representada por innumerables compañías en el ámbito internacional, sobre todo en el presente año en el que se conmemora la muerte del escritor, dramaturgo y poeta andaluz.